Una vez hemos estudiado, con la ayuda de las cámaras de fototrampeo, los movimientos de los sujetos, las horas de entrada y salida, la dirección de los desplazamientos, la localización de su madriguera… tenemos muchas opciones de poder hacer fotos con barreras infrarrojas o sensores de movimiento, que sin estar presentes en el lugar, harán que se dispare nuestra cámara, apoyada con flashes o sin ellos. Parece una técnica complicada, pero con la práctica nos daremos cuenta de que montar el equipo no es tan dificultoso y nos puede dar unos resultados sorprendentes.